Esther Ponce Magazine

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XANA

Xana , una historia real…


Pero XANA era diferente a sus 3 hermanas, desde el día  que nació en la ría del Nalón mientras su madre lavaba,  ya estaba bendecida para presentir durante toda su vida el futuro y salvar vidas


“El Hechizo I “

XANA, Ășltimamente solo querĂ­a estar en San Juan de la Arena, el lugar que la vio nacer como una angula en la orilla del mar cuando su madre dio a luz. Sus paseos a las fuentes, las hogueras de San Juan, el mar CantĂĄbrico , la naviera de la familia el LerĂ© 
 Era  asturiana y fuerte como un roble, pero como era ley de vida, se estaba haciendo mayor. Su pequeña prominencia  en medio de la frente, era tan personal, que la convertĂ­an en una mujer llena de misterio, de historias mĂĄgicas, de sabidurĂ­a


Era el primer verano que los hijos de Elvira, no veraneaban  en la playa y todos les echaban mucho de menos, la princesa de Kapurthala bailando en Barcelona e Ismael en Estados unidos estudiando. 

XANA, sentía algo muy especial por Ismael, el primogénito de Elvira. Desde que era muy pequeño, le advertía a su hija, que tuviese mucho cuidado, que con esos rizos dorados y tan bonito que era,  se lo podían robar.  Predijo que Ismael cuando fuese mayor, experimentaría una transformación física y se parecería muchísimo a ella. Y cada vez que le mirase vería su reflejo. 

Esa noche después de cenar XANA se quedó mirando al mar y recordó la historia del alacrån en el Real Sitio de Solån de Cabras


Era una mañana de sol radiante en  la Serranía de Cuenca. El  agua curativa y pura del manantial, hacía que XANA y su familia visitaran muy a menudo el lugar que desde el 182. A. C había curado artritis y otras enfermedades. Ese día iban el General Ponce, su yerno Federico con su hija Carmina, su nieta Merceditas de diez años y  Elvira con Ismael de seis . Iban todos en un todo terreno Mehary descapotable, nombre de origen årabe del fabricante francés Citroën. Con tres filas de asientos que llenarían de agua sanadora.  

A XANA le encantaba cortar ramas de romero con una navaja pequeñita y ponérsela en el pelo, no necesitaba horquillas porque lo tenía tan rizado, que se lo metía dentro y parecía que había nacido allí el romero. Su nieta Esther, que tenía el mismo pelo, hacía lo mismo desde que tenía dos añitos. Una tradición que mantendría en su vida, cada vez que se subiera a un escenario a bailar . El olor a campo fresco y el recuerdo de su mamaíta, sería su mejor fuente de inspiración y siempre  le traería suerte. 

Era ya por la tarde cuando XANA , cortando una rama de romero, sintiĂł como si una aguja le  penetraba muy lenta y dolorosamente el brazo. Era un alacrĂĄn enorme escondido que le habĂ­a clavado el aguijĂłn,  con una dosis inmensa de neurotoxinas que afectan al sistema nervioso provocando taquicardia, dificultad para respirar, ! incluso la muerte!. XANA , sin pensarlo dos veces, valiente como un toro, se rajĂł la piel con la navaja y empezĂł a chupar y a escupir la sangre junto con el veneno repetidamente, pensando Ășnicamente en Dios y en su virgen del Socorro.  Que se la habĂ­a dado antes dĂ© tiempo a Esther para que la protegiera en Barcelona. No podĂ­a quedar ningĂșn resto de veneno en su sistema  y tenĂ­a que salvar su vida. Ante la atenta mirada de toda la familia que no se atrevĂ­eron a decir ni una palabra
excepto su maridito, el reciente Juez de Paz, que decĂ­a en voz alta y con un amor infinito; — el dĂ­a que me faltes Carminina , yo faltarĂ© despuĂ©s . 

Lo mismo que predijo su suegra Elvira antes de fallecer con tan solo cuarenta años. Dejando a XANA con diecisĂ©is, siendo madrina de guerra , esposa y madre ; — Hija, conocerĂĄs al que serĂĄ tu marido, y te querrĂĄ tanto, que morirĂĄ de pena por ti, le dijo su madre en su Ășltima noche de vida
Palabras sabias de una madre, que se hacen un hueco en el corazĂłn para el resto de la vida. En el camino de vuelta, XANA le preguntĂł a su yerno Federico, por su hijo Emilio, que le llamaban manitas de oro,  y que trabajaba ya con Ă©l en la clĂ­nica. Fue su hija Carmina, quien le contestĂł , que estaba muy enamorado de una modelo y se mostraba muy nervioso Ășltimamente. 

A partir de ese viaje, XANA empezĂł a descifrar el enigma del escorpiĂłn. Ella creĂ­a que todo lo que le sucedĂ­a en la vida era un mensaje de Dios,  que actuaba  a travĂ©s de las personas.  La novia de Emilio era muy buena modelo, altĂ­sima, blanca como la leche, extremadamente delgada como una bailarina que sufre de anorexia, con el pelo de color avellana muy largo y liso como la seda,  y con unas facciones de tal belleza que todo el mundo se giraba para mirarla. En la playa  se bañaba con una tĂșnica de un diseñador muy conocido ibicenco y parecĂ­a una diosa cuando salĂ­a del agua.  XANA no tardĂł mucho tiempo en descubrir que se gastaba en diacetilmorfina, el dinero que su nieto Emilio, robaba a su padre de la clĂ­nica. La heroĂ­na, era la droga de moda que quitaba el hambre a las modelos  y las mantenĂ­a en una talla treinta y cuatro. Emilio cada vez se parecĂ­a mĂĄs a su bisabuelo el cubano, era guapĂ­simo,  pero su preciosa y conquistadora sonrisa,  estaba viviendo en primera persona  la mĂ­tica frase del diseñador francĂ©s, Cristhian Audigier, “ El amor mata lentamente”. Un amor muy joven vĂ­ctima de la ingenuidad , que se pinchaba en la planta de los pies y en el paladar para que nadie descubriera su adiciĂłn . Antes de morir de una sobredosis,  tuvieron una hija preciosa que naciĂł el mismo dĂ­a que ella y a la que llamaron Amor. 

XANA Por fin habĂ­a encontrado la respuesta a la pregunta que se hizo durante muchos años sobre la filipina y esperĂł a quedarse sola con su hija Elvira; — No permitas nunca mi vida,  que Angel te falte el respeto. Âż Recuerdas que te dije que un dĂ­a averiguarĂ­a lo que no me gustaba de la filipina? Pues ya lo sĂ© . No dejes a tu marido solo mucho tiempo con ella y mejor vete tĂș a comprar con Ă©l . Para que la  gente no murmure a tus espaldas y te haga sufrir. Tienes que evitar que la complicidad entre ellos cada vez sea mayor
le aconsejĂł XANA. 

Pero a Elvira, le entraba por un oido y le salĂ­a por otro. Era la mujer menos celosa de España.  PreferĂ­a pasar el tiempo con sus hijos y sus amigos . Cargar bolsas con kilos de comida para una familia tan numerosa, no era el mejor plan. Y la filipina, tampoco era la Ășnica pretendienta que tenĂ­a Angel. Cuando Elvira entraba en Hispavox, cantantes jĂłvenes y guapas que querĂ­an ser famosas a toda costa le tiraban los tejos. Afortunadamente, su Paul Newman era fiel y un gran profesional dedicado a su familia. 

XANA estaba haciendo la maleta para viajar a Barcelona a ver actuar a su nieta. Quería evitar a toda costa que se produjera el hechizo y llegaría de sorpresa y antes de lo previsto. Cuando de repente, empezó a sentir un fuerte dolor de cabeza, no podía mover la mandíbula y las lågrimas salían de sus ojos sin control. Estaba sufriendo una embolia. No pudo viajar y el doctor dijo que la  parålisis facial le impediría hablar durante mucho tiempo y por su edad, probablemente años. XANA Estaba acostumbrada a contestar al teléfono y a partir de entonces, tendría que hacerlo su hija pequeña, Amparo, que Vivía con ellos ya que nunca se casó ni tuvo hijos, como la hermana de su abuela, Sara.

Mientras en Barcelona estaba a punto de suceder lo inevitable. 

Era el día de descanso de la compañía y todos los bailarines se fueron a la playa con la directora a pasar el día. El marido de la directora , aunque no estaban casados, era gitano de raza y llevaban saliendo , bailando, viajando y viviendo juntos con el Ballet Nacional de España mås de ocho años. Ella era  paya pero al vivir  con un gitano, no seria su novia, seria su mujer. Tenían ya veinticuatro y veintiséis años y su relación era tormentosa. Por lo que ella,  después de una bronca con su marido y cómo era la que cobraba el dinero de las dietas, le dejó en el hotel y sin dinero. 

Esther era una dormilona y ni siquiera Sonia, le pudo convencer de que se levantara. Le apetecía despertarse tarde sin prisas, desayunar en la cama y luego bajar a visitar alguna galería de arte cerca del hotel. La calle de las Ramblas tenia mucha vida , de día y de noche. 

A Esther le quedaban unos meses para ser mayor de edad y el surfero , seguĂ­a en Lima con su familia. Estaba deseando verle en Septiembre que ya habrĂ­a terminado el contrato en el teatro y coincidĂ­a que Ă©l tambiĂ©n volvĂ­a a Madrid.  Un año entero sin verse era mucho tiempo para ellos y su amor seguĂ­a vivo y puro


El surfero antes de marcharse para un año y medio, le pidiĂł a Esther que tenĂ­a entonces diecisĂ©is años, culminar su primera noche de amor en la intimidad de la cueva de la iglesia , en el cuarto donde ensayaba el grupo  que tenĂ­a de todo, nevera, televisiĂłn y un espacio muy romĂĄntico con un biombo que separa el futĂłn japonĂ©s. Esther le dijo que preferĂ­a esperar a que el volviera y que si se querĂ­an de verdad, se esperarĂ­an mutuamente . No querĂ­a que su primera vez fuese en la iglesia, pero que era el lugar perfecto para sellar su amor


Esther preparĂł dos velas blancas pequeñas y cada uno encendiĂł la suya. DespuĂ©s, las juntarĂ­an para con ese fuego, encender la vela grande al mismo tiempo que decĂ­an lo agradecidos que estaban de haberse cruzado en el camino. Seguidamente Esther sacĂł un lienzo, dos pinceles y pinturas color pastel que le pidiĂł a su padrino  Don julio Prieto. EligiĂł los colores junto al maestro de maestros para su ritual de amor.  D. Julio que tenĂ­a ya noventa años, disfrutĂł y sonrĂ­o muchĂ­simo  escuchando la bonita y pura historia de amor de Esther. Cada enamorado pintarĂ­a un sĂ­mbolo que recordaran a su historia de amor. La pincelada verde y azul simulando la tabla de surf, las zapatillas de puntas de ballet difuminadas , la noche oscura y el miedo 
no podĂ­an faltar. El cuadro se quedĂł allĂ­ . El surfero  que no sabĂ­a nada de lo que Esther habĂ­a planeado, improvisĂł y puso como banda sonora para la ocasiĂłn la espectacular balada del grupo de heavy metal Scorpions, “ IÂŽm still loving you” quĂ© fue con la canciĂłn que empezaron a salir y con la que Esther lloraba cuando le echaba de menos. Como Ășltimo se escribieron una carta de amor cada uno, que llevarĂ­an haya donde fueren. 

Uno de los recepcionistas del hotel, estaba enamorado de Esther. Se llamaba Fernando. Había dado orden a las chicas de la limpieza de llevar a su habitación, los ramos de rosas y flores que se quedaban en las habitaciones de los artistas. Era joven, estudiaba en la universidad y en verano se sacaba un dinero extra en el hotel de su tío.  A Esther le encantaban  sus ojos azules , su gran sentido del humor y pasaban mucho rato juntos. 

Era ya casi la hora de comer, Esther bajó a la recepción a darle las gracias a Fernando por los bombones  que le habían llevado a la habitación de su parte. Muchos días le enviaba los bombones de regalo de bienvenida que se dejaban en las suites de lujo. 

Al salir del hotel, Esther vio sentado en el lobby al marido de la directora, Ă©l gitano.  Esther le preguntĂł que porque no habĂ­a ido a la playa con su mujer y el resto de la compañía. Le contestĂł que se habĂ­a enfadado y le habĂ­an dejado solo y sin dinero. A Esther no le gustĂł nada el gesto de egoĂ­smo que tuvo la jefa y le dijo que sĂ­ querĂ­a comerse un sandwich caliente de jamĂłn y queso en la sandwichera que tenĂ­a en la habitaciĂłn. Él aceptĂł con la condiciĂłn de que cuando tuviese dinero,  invitarla a comer. Pero Fernando que estaba escuchĂĄndolo todo, informĂł a Esther que la habitaciĂłn se estaba haciendo y tendrĂ­an que esperar. Es cuando Esther le hizo al bailarĂ­n la pregunta que llevaba tiempo pensando; Âż CuĂĄntas piruetas seguidas haces? 
normalmente los chicos hacen mĂĄs piruetas que las chicas,  un bailarĂ­n bien preparado y con una buena tĂ©cnica suele hacer un mĂĄximo de cuatro o cinco seguidas . El bailarĂ­n no le contestĂł a la pregunta, se levanto del sofĂĄ y ahĂ­ mismo hizo un Tendu con el pie derecho, lo colocó  detrĂĄs haciendo una cuarta posiciĂłn de ballet y empezĂł a girar, una , dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho
Esther no se lo podĂ­a creer, ÂĄparecĂ­a un sueño! y quiso formar parte de Ă©l. Se   colocĂł a su lado, se preparĂł y empezó  a girar, una, dos, tres, a la cuarta pirueta se tropezĂł con la moqueta y el bailarĂ­n la sujetĂł por la cintura, se quedaron muy cerca el uno del otro, aunque en el escenario estaban asĂ­ todos los dĂ­as
le colocĂł el brazo derecho que tenĂ­a un poco mĂĄs alto que el izquierdo y  por eso perdiĂł el eje y se fue hacia un lado. 

Esther se fijĂł en sus manos, aunque era bajito de estatura, las manos eran preciosas y muy delicadas, parecĂ­an las de un cristo, delgadas, largas y de color canela. TenĂ­a los ojos rasgados y grandes de color avellana, que la miraban con una profundidad como nunca antes nadie la habĂ­a mirado. TenĂ­a la nariz como las estatuas  griegas y el pelo largo como los bailarines. Era  muy educado y solamente le sonreĂ­a a  ella ; —para ser tan joven y al principio de tu carrera, giras muy bien, ademĂĄs de que eres guapĂ­sima y hasta el divo Alfredo Kraus tambiĂ©n  se ha fijado en ti, le dijo el bailarĂ­n.  

SiguiĂł contĂĄndole  que le ofrecieron un puesto de primer bailarĂ­n en el Ballet Nacional de clĂĄsico, pero que siendo gitano y de la familia de artistas de la que procedĂ­a, con la danza española y el flamenco en el Ballet Nacional tendrĂ­a mas futuro. Esther ya casi no escuchaba lo que decĂ­a, solo le miraba con admiraciĂłn y no querĂ­a despertar del sueño
ella ya se veĂ­a bailando en teatros importantes del mundo. Ya no importaba nada mĂĄs. Al llegar a Madrid, los directores de las mejores compañías de flamenco estilizado se pondrĂ­an en contacto con ella , como le dijeron al ganar el concurso y ocupando ya puestos de solista y primera bailarina. Todo era de color rosa, pero fuera del sueño, Esther no sabĂ­a dĂłnde se estaba metiendo. A partir de entonces,  jugarĂ­a con fuego. En ese momento Fernando el recepcionista que estaba celoso perdido, interrumpiĂł bruscamente la escena que llevaban protagonizando mas de una hora en el lobby del hotel. Esther entonces escucho  internamente la voz de su madre Elvira que decĂ­a;  —Nena, cada cual debe seguir su camino y no entorpecer el de los demĂĄs. Si te molestan en el tuyo, apĂĄrteles de Ă©l, los que quieran seguir tu camino, les darĂĄs la mano. 

Después de tres meses toda la compañía que ocupaba el escenario del Liceo de veinticinco metros de ancho, diecisiete de fondo y veintitrés de altura, se conocían ya muy bien . Pero la química que había en el escenario entre los novios , no era la misma que al principio. Aprovechaban el momento de interpretar para dar rienda suelta a su enamoramiento y su pasión. El beso que marcó el Director  en la escena en la que el pueblo pide a gritos a los novios que se besen, no era él mismo. Alfredo Kraus que tenía mucho aprecio a Esther y que les cantaba a diario a un metro de distancia,  se dio cuenta enseguida y advirtió y aconsejó a Esther en el camerino, que ese hombre no era para ella, qué pertenecían a dos mundos totalmente distintos y que no podría funcionar. Pero Esther ya estaba hechizada y no había marcha atrås.  

Era 28 de Agosto y Esther cumplía dieciocho años. ¿Quién le iba a decir a ella que ese día cambiaría su vida para siempre? .Todos seguían en la casa de la playa y como cada año, el treinta, volvían a Madrid.  Desayunaron un riquísimo  chocolate con churros como era la tradición de fin de verano en la terraza  , mirando al mar y preparando el escenario para la verbena de por la noche . 

XANA seguía malita, tenía paralizado medio lado de la cara pero quería estar allí cuando Esther llamara.  Cuando sonó el teléfono, XANA sabía que era Esther. Elvira no le había contado lo sucedido, querían esperar a que terminase el contrato porque sabían que era muy pasional, que lo dejaría todo y saldría corriendo hasta poder  abrazar a su mamaíta.

Cuando sin esperarlo nadie, XANA dio un salto, adelantĂł a Elvira y agarrĂł el telĂ©fono. Su infinita fe y su enorme fuerza mental, fueron tan poderosas que le dijo ; —¡ Felicidades mi princesa! Elvira y Angel no se lo podĂ­an creer, tenĂ­a que ser una broma, ÂĄ era imposible que pudiera hablar!  ¥ Se habĂ­a curado! Solo habĂ­an pasado dos semanas y le diagnosticaron años.  

¥ No te pierdas el próximo capítulo !  Cap.12

“El Hechizo II” 

XANA, Elvira y Esther.

Saca la flamenca que llevas dentro estå dedicado a todas las mujeres del mundo y no significa que tengas que ser flamenca o que te dediques al mundo de  la danza. Es una expresión, es una manera de enfrentarse a los contratiempos que nos pone la vida y porque el flamenco tiene esa actitud de ¥aquí estoy yo!

Sacar la flamenca que llevo dentro me ha ayudado en muchísimas situaciones muy extremas en mi vida y no solamente hablando técnicamente como profesional del flamenco, sino  que en ese momento no tenía porque estar bailando, ni demostrando, ni compitiendo,  ni subida a un escenario,hablo en la vida del día a día.

Por eso tĂș tambiĂ©n puedes sacar la flamenca que llevas dentro. 

Una flamenca es segura, una flamenca tiene seguridad, tiene peso, tiene porte, tiene sabiduría y sabe estar al mando. 

O sea que saca la que tĂș tienes de dentro y apuntate conmigo a esta aventura en la que ÂĄnos lo vamos a pasar genial ! que sabemos como empieza y no sabemos cĂłmo acaba, pero que seguro va a ser una de las experiencias mĂĄs inolvidables de tu vida.

”

No me ha hecho falta ser famosa para dormir en la Suite Presidencial  de Hemingway en el Gritti Palace de Venecia todos mis cumpleaños. 

Tomarme un Bellini mientras espero la góndola que me llevarå a la fiesta privada del Festival de cine en el yate de mi colega el que fuera colaborador de Versace o cenar en la famosa terraza del Hotel Danieli. 

TambiĂ©n es cierto que si me hubiese acostado con todos mis acosadores, ahora serĂ­a mĂĄs famosa que Sara Baras. ÂĄPERO! por mĂĄs que me duchase, no se me quitarĂ­a el olor a vomito del cuerpo y la frase de : “cĂłmo lo conseguí” serĂ­a la banda sonora de mi vida, que me revolverĂ­a las entrañas en cada aplauso. 

Tampoco me ha hecho falta ser famosa para tener un guardaespaldas que me escolte hasta la puerta del avión, con dirección a La Embajada de America en Beirut o Ir en Limousine y beber champagne del mejor. 

“Todo lo he conseguido con pasión, seguridad en mi misma , esfuerzo y dedicación”. 

”

Demostrando primero a mi misma y después al mundo entero, que no necesito venderme a un hombre para triunfar en mi carrera. Y que saco la flamenca que llevo dentro  cada vez que se cruzan en mi camino. 

No permitas que ningĂșn hombre te mande o te exigĂ­a lo que tienes que hacer. 

Lucha por lo que quieras, viste como quieras, maquĂ­llate como quieras , estudia lo que quieras y jĂșntate con quien quieras.

La primera vez que un hombre te ponga la mano encima, serå su culpa, pero la segunda vez serå tu culpa por haber aguantado la primera. 

Y si te sientes atrapada y tienes miedo a plantarle cara a tu realidad, busca la manera como si fuese el Ășltimo dĂ­a de tu vida de dar una señal en la farmacia, en el mercado, a un vecino que te cruces, a cualquier persona que pueda escuchar este nĂșmero : 016! y serĂĄ el primer paso a tu salvaciĂłn, a tu nueva vida, seguro que llena de todas las cosas buenas que anhelas y donde nadie te dejarĂĄ que des marcha atrĂĄs. Inmediatamente estarĂĄs protegida por la sociedad que te protegerĂĄ y te ayudarĂĄ sin condiciones . Y yo, Esther Ponce, ya estoy pensando en ti. 

SACA LA FLAMENCA QUE LLEVAS DENTRO #SACALAFLAMENCA

”
He sufrido mås de 10 acosos laborales de personajes muy famosos del mundo del espectåculo, y sabiendo lo que ahora sé, lo hubiese denunciado. 

Os voy a ir contando como he sacado la flamenca que llevo dentro en situaciones extremas y que ojalĂĄ y sirva para ayudar a alguna mujer para que haga lo mismo que yo.

De momento no voy a dar nombres y utilizaré motes.

Si me hubiera acostado con todos mis acosadores serĂ­a mas famosa que Sara Baras.

”
 

Con mi testimonio y mi propia experiencia, viviendo en diferentes paĂ­ses del mundo y relacionĂĄndome con todo tipo de clases sociales, raza, cultura y religiĂłn, quiero darle la vuelta al drama que viven las mujeres en el mundo.
Ayudarlas a salir de ese callejón oscuro, animarlas y convencerlas de que nunca tiren la toalla , de que existe un mundo maravilloso esperåndoles para sacar lo mejor de ellas. Su fuerza, su belleza interior y sus ganas de salir adelante. Que no dejen de luchar por los derechos de la mujer y la igualdad de género. Que griten a los cuatro vientos  y que no se callen nunca, que sonrían y que se llenen de paz con la belleza que nos brinda Lanzarote y su naturaleza.
Que no estĂĄn solas
 quĂ© saquen la flamenca que llevan dentro. Una mujer fuerte y segura de sĂ­ misma, la directora de su propia vida. Que se agarra al suelo con templanza y lista para arañar en cualquier momento si hace falta y torear a la vida con la mejor sonrisa
 

”

Tengo experiencias y anĂ©cdotas para contar a todas las mujeres;  las de barrio , las cayetanas, las conflictivas, las adictas, etc. Y siempre con mi lema de que para salir huyendo de cualquier situaciĂłn, lo mejor, ÂĄ practicar el atletismo! 
  Mi tĂ­o me llamaba Atleta de la Danza , decĂ­a ; Mientras  tengas las piernas y el corazĂłn fuerte, ÂĄpodrĂĄs volar! . 

Esther Ponce's experimental Flamenco is ready for the Valencian Director of Tourism to meet

It is very gratifying to have an idea like the experimental Flamenco in Valencia, carry it out and have managed to attract more than 20 foreign clients to Valencia in a short time and without marketing, who have passed through the Flamenco Art Center, and who have not only They learned a lot if not they have returned to their country with a better concept of Valencia.

His experience and approach to flamenco led by Esther Ponce will make you return without hesitation to the city of Turia.

Esther Ponce not only surrounds them with her passion and charisma from the first moment, her professionalism and a very long journey through different countries of the world where she has lived for long periods, she makes them fall in love.

You just have to read the dedications of all the foreigners who write in their precious notebook created for them and that are already adding more and more.

«They also buy semi-professional shoes and a skirt to study with me.» That’s already the best! –
~ Esther Ponce

 The foreigner is used to teaching flamenco very quickly and without discipline, anything goes, any shoe, any skirt, hanging out even parodying and even ridiculing flamenco.

With me if they want to study two private hours which is the minimum, they are given the option of buying or renting the shoes and none of them have thought twice about it to this day.
 
«Being a polyglot, doors just open up to me» –
~ Esther Ponce
 
Definitely the Experimental Flamenco of Esther Ponce has an Angel!

From England, without a doubt the most special Experimental Flamenco we have had at the Flamenco Art Center in these two and a half years.

The Esther Ponce Stylized Flamenco Art Center has been open for two and a half years. El Ángel Every August 28, for Esther’s birthday, a new foreign student gives her a gift and the flamenco toast intensifies.

«The students do not want to miss the opportunity to study with me. When they start to study my technique they are hooked at the first second. Those who play sports and take care of themselves immediately identify with my stretching and feel safer for the rest of the class and those who don’t appreciate it and will surely start practicing it and taking care of themselves forever »
~ Esther Ponce

This year Esther thought that her Angel would be very busy due to the current pandemic situation and also that it would be a coincidence that another year happened.

But to Esther’s surprise it was like that and without doubt the most special flamenco toast for England.

«Discipline is my hallmark and not even the Covid has stopped us» «I have never doubted it and I will only teach classes with a mask»
~ Esther Ponce

After the experience of teaching classes with a mask? A private flamenco class for two hours without stopping, does Esther remember that when she and the student went out into the street they breathed for two seconds as if there were no tomorrow?According to Esther’s recent experience, with the mask you cannot see the total expression of the student, but the eyes also speak and flamenco is also expressed with the body.

With all the safety measures, the student disinfected her shoes, put hydroalcoholic gel on her hands, a temperature control was performed with a non-contact forehead thermometer and the student did not remove her mask during the two hours, only in the changing room that she only used to drink water. 

“Now I can present my Experimental Flamenco to the director of Tourism of Valencia and let him roll with the little ham :)”
 
~ Esther Ponce